Ciudad de México, 14 Nov.- Conocida como la osa polar «más triste del mundo», Pizza, como fue bautizada esta linda mamífera, por fin abandonó el centro comercial en el que se encontraba recluida y exhibida, ubicado en la ciudad de Guangzhou, en el sur de China.
De acuerdo con un portavoz del establecimiento, Pizza es una osa polar que junto a 500 especies diferentes, habitaba en el acuario del centro comercial de Guangzhou.
Fue gracias a la organización estadounidense Humane Society International (HSI), que se viralizó un video en el que se mostraban las verdaderas condiciones en las que vivía Pizza, y el estrés y la profunda depresión en la que se encontraba.
La misma organización, lanzó una campaña para recolectar firmas alrededor del mundo y exigir la liberación de Pizza, a quien en el video se le observa dando vueltas en un espacio de vidrio de 40 metros cuadrados, sin ventilación ni luz natural.
Este lunes, por fin se anunció que la osa polar volverá al puerto de Tianjin, donde se encuentran las instalaciones en las que fue criada en cautiverio, de acuerdo con información de medios locales.
Aunque no es una buena noticia, lo cierto es que devolverla al hábitat natural de un oso polar, resultaría ser un cambio drástico y difícil para ella, que incluso podría poner su vida en peligro puesto que no está acostumbrada a la vida natural.
Sin embargo, los cuidadores del centro comercial sí están capacitados para recrear un ambiente similar a su hábitat que le permita tener luz natural y aire fresco, que es lo que más de un millón de personas han pedido, en la iniciativa lanzada por HSI.
En un comunicado, el centro comercial al que «pertenece» Pizza, ha informado que el traslado de la osa será temporal, mientras el acuario termina de ser renovado.
Por su parte, la ONG fijó su postura e imploró «al centro comercial que convierta este traslado en algo permanente para Pizza y que no la condene al regreso”, indicó a los medios de comunicación, Peter Li, un experto de HSI.
“La osa polar tuvo una vida de privación y sufrimiento en el acuario”, recordó Li. “Al menos sentirá el sol en su pelaje, respirará aire fresco y verá el cielo junto a su madre y su padre”, agregó Peter Li, experto y portavoz de la organización.
El oso polar es una de las especies que más afectada se ha visto, por la pérdida de su hábitat natural, especialmente como consecuencia del cambio climático.
De acuerdo con cifras del World Wildlife Fund (WWF), existen entre 25 y 30 mil osos polares en todo el mundo, por lo que su estatus es crítico.
Un comentario
Por favor que se quede con sus padres ,que no vuelva donde tan mal lo paso ,debemos proteger a esta especie que se extingue por el medio ambiente