La cantante Alicia Villarreal hizo estallar las redes cuando alzó la mano y emitió la señal de alerta de violencia de género.
Ello, tras el show que ofreció en Zitácuaro, Michoacán, el fin de semana antepasado.
En pocos minutos se hizo tendencia el fragmento del video con la señal internacional de auxilio (dedo pulgar doblado hacia la palma y los cuatro dedos restantes cerrados sobre él).
Denuncia
Posteriormente, la cantante acudió a la Fiscalía Especializada en Feminicidios y Delitos contra la Mujer, en Monterrey, para levantar la denuncia contra su aún esposo y padre de dos de sus hijos, Cruz Martínez, a quien acusa de violencia.
Natalia Ivereck, psicóloga egresada de la Universidad de Guadalajara e integrante del Colectivo Psicólogas Feministas, explica que cuando una mujer decide hacer pública una situación de violencia, es porque es un acto desesperado para ella, porque muy posiblemente ya buscó muchas maneras de zafarse de esa relación de abuso sin lograrlo.
«Me parece un acto muy valiente de parte de Alicia haber hecho esta señal, porque entendiendo su situación, anima a que otras mujeres que no son artistas o no tienen ese foro, puedan atreverse a utilizar ese llamado de auxilio porque que una figura pública lo haga esto nos avisa que ninguna está exenta de vivir esta violencia», dice la doctora, quien ha trabajado con víctimas y sobrevivientes de violencia de género.
Otras colegas
Al igual que Villarreal, otras artistas que han pasado por situaciones similares, como Rihanna, Lupita D’ Alessio y Madonna tienen una imagen de mujeres independientes, fuertes y empoderadas, por lo que el aceptar públicamente que son víctimas de violencia es un duro golpe en su autoestima y en su imagen ante los demás.
«Lo que más limita a una mujer como ellas a una denuncia es que se va a ver vulnerada por la vergüenza que pueden sentir, por la mirada y el juicio de los demás, y aunque pareciera que nos podemos solidarizar con ellas ante una situación así, la realidad es que no, porque lo medios de comunicación y ahora las redes sociales son muy violentas y pueden revictimizar a las mujeres que hacen estas declaraciones».
En el caso de Alicia y otras figuras públicas que se han visto vulneradas con un acto violento, comenta la especialista, espera que cuente con la empatía de las personas.
«Que no tengamos una figura de víctima perfecta, de una mujer llorando y lastimada físicamente para que creerle».
Fuente: El Universal







