Ciudad de México, 2 Ago.- En Medellín, todos hablaban del Nuevo mundo, recordaban al joven travieso, que estudió abogacía en la Universidad de Salamanca, que fue escribano y muy enamorado; hijo de Martín Cortés y de Catalina Pizarro. Comentaban que Hernán, siempre fue rebelde, que conocía el latín y que trabajó en Valladolid.
Llegó a la isla La Española, hoy Santo Domingo, de 19 años, fundada por Bartolomé Colón, en 1498, hermano del descubridor.
Que Cortés estuvo en la Villa de Azúa y que ya estaba en Cuba, antes Fernandina, en honor al rey, gobernada por Diego Velázquez de Cuéllar, de quien era su secretario.
Velázquez de Cuéllar, de familia aristocrática, preparado, respetuoso, culto y profesional de las armas como todos los de su clase. Fue invitado por Bartolomé Colón, hermano de Cristóbal, al segundo viaje a las Indias el 25 de septiembre de 1493.
En Cuba, Diego Velázquez y Cortés eran socios; a parte de atender el Gobierno, eran ganaderos, plantaban plátano, café y caña; el primero acrecentaba su fortuna y el segundo se enriquecía. Diego, gobernaba con estricto cumplimiento de la Ley.
Cortés de tez blanca y pálida, cuerpo bien formado, mirada tranquila, que escondía malicia del alma, barba escasa y negra, piernas cazcorvas, consecuencia de la montura; diestro en las armas, cuerpo a cuerpo o en su corcel.
Su valentía era famosa y decían que por su incitación por las mujeres, en La Española mató a varios hombres en defensa de su vida al ser descubierto acosando a las damas.
La cicatriz en su mejilla derecha, oculta por la barba, era un recuerdo de sus reyertas.
Vestía pulcro, de buen trato, hacía poemas y escribía en prosa; iba a misa diariamente.
Como jefe militar era muy exigente, reprendía con severidad a los soldados descuidados e imponía castigos para corregir las fallas. Conversaba con Pedro de Alvarado:
–Tuve un sueño cuando vivía en la antigua Española: Me decía a mí mismo, frente a un espejo: “Haz de comer con trompetas o muere ahorcado”.
–Lo sentí como un mensaje, convencido estoy que he venido a estas tierras a convertirme en poderoso, la riqueza llegará sola, pero ansío títulos, estar cerca del rey, ser miembro de la Corona.
Continuará…
Un comentario
hola, me interesa la historia especial donde actuan los españoles, pero ese fragmento “Haz de comer con trompetas o muere ahorcado”. En que libro viene saludos buena lectura!!