Alexis Nickin Gaxiola comparte que en un entorno donde la innovación tecnológica y la competencia crecen a ritmo acelerado, las empresas Fintech han encontrado un nuevo diferenciador que va más allá de la eficiencia operativa o la experiencia del usuario: la sostenibilidad ambiental.
De acuerdo con el especialista en empresas de tecnología financiera, aquellas firmas del sector que han adoptado una postura activa frente a los retos medioambientales están comenzando a destacar significativamente en un mercado saturado de opciones, pero carente de compromisos reales con el planeta.
Para el experto mexicano, la conciencia ambiental no solo debe ser una postura ética, sino una estrategia empresarial inteligente.
«El usuario actual, especialmente el de las generaciones más jóvenes, valora cada vez más a las empresas que tienen un propósito claro y que están alineadas con causas globales como la protección del medio ambiente. Las Fintech que entienden esto y actúan en consecuencia están ganando terreno», afirma Alexis Nickin Gaxiola.
En contraste con la pasividad que aún se observa en muchas empresas del sector, algunas Fintech están liderando iniciativas que integran principios de sostenibilidad desde su diseño operativo.
Un ejemplo destacado es la startup sueco Doconomy, que ha desarrollado una tarjeta de crédito que calcula la huella de carbono de cada compra y ayuda a los usuarios a tomar decisiones más conscientes sobre su consumo.
Asimismo, plataformas como Aspiration en Estados Unidos han apostado por servicios financieros que excluyen inversiones en industrias contaminantes, ofreciendo a sus usuarios la posibilidad de plantar árboles o destinar parte de sus transacciones a proyectos medioambientales.
En ese sentido, Alexis Nickin Gaxiola, plantea que este tipo de propuestas no solo responden a una necesidad ética, sino que construyen valor de marca, fidelización del cliente y acceso a nuevos mercados, sumando inversionistas comprometidos con la llamada economía verde.
El también especialista en finanzas digitales destaca que la sostenibilidad puede integrarse desde múltiples ángulos: desde el uso de servidores energéticamente eficientes, pasando por algoritmos que promuevan un consumo financiero responsable, hasta programas internos de cero papel y reciclaje tecnológico.
En un mercado donde la diferenciación es cada vez más difícil, la conciencia ambiental se presenta como un elemento clave para construir ventajas competitivas sostenibles y así lo plantea el experto mexicano, quien considera que las Fintech del futuro no será solo digital, sino también ecológica, ética y socialmente comprometida.







