Hay preocupación de vecinos de la colonia Guerrero, en la alcaldía Cuauhtémoc, por la situación de 40 gatos ferales que viven en el lugar.
Los habitantes de esa zona esperan desde hace cinco meses que la administración del panteón San Fernando les permita ingresar de manera constante para alimentar y revisar la salud de los felinos.
Diana Arredondo, maestra de español y fundadora del proyecto Catacumberitos, dedicado a cuidar a los gatos del lugar, denunció que las actuales autoridades del museo no han contestado a sus solicitudes.
“En los oficios que he ingresado le pedimos a la administración que nos den más días para entrar al panteón, que una vez cada cierto tiempo permitan la entrada a más de una persona para poder alimentar y limpiar las zonas en donde viven y que den acceso a médicos veterinarios que nos ayudan a desparasitar, esterilizar y valorar el estado de salud de todos los animales”, explicó.
La presente dirección del panteón llegó el primer semestre de 2023 y canceló los accesos que ya tenían los vecinos desde 2022. Mientras que a través de nuevas solicitudes determinó que sólo Arredondo podía pasar los martes y jueves por una hora.
Debido a la reducción de tiempo, los michis han sufrido daños y percances al buscar más alimento fuera del panteón.
Catacumberitos
El proyecto de Catacumberitos surgió hace más de dos años, cuando Diana se percató de la existencia de la colonia de felinos dentro del panteón y al ver el estado en el que sobrevivían decidió pedir permiso al museo para poder hacerse cargo de ellos.
“A la administración pasada le gustó la idea y apoyaron el proyecto, hay un primer video que permanece en las redes sociales del museo. Hicimos el registro de todos los michis de ahí, que en ese momento eran 30. Se vacunaron, se esterilizaron. Todo ha sido tan responsable que yo tengo todas sus cartillas de vacunación y todos tienen nombre”, señaló.
En ese tiempo también han dado en adopción 20 felinos, pero la población felina sigue creciendo por la irresponsabilidad de otros habitantes que echan a la calle a sus mascotas o no los esterilizan y al salir de sus hogares se reproducen.







