Un juez de control concedió la suspensión condicional del proceso penal a Catalina «L», una mujer de 58 años detenida el 24 de septiembre por arrastrar a un perrito con un cable atado a la defensa de su camioneta en el fraccionamiento Revolución en Tlaquepaque.
Entre las condiciones impuestas por el juez, se incluye la obligación de donar un costal de 20 kilogramos de croquetas marca Nupec cada mes durante seis meses.
También asistir a tratamiento psicológico en una institución pública. Firmar mensualmente en la Unidad de Medidas Cautelares durante el mismo periodo y participar en un curso de adiestramiento en la unidad canina del Ayuntamiento de Guadalajara.
Catalina fue vinculada a proceso penal el 26 de septiembre por el delito de crueldad animal. Se le había impuesto una prisión preventiva de tres meses. Sin embargo, gracias a la suspensión condicional del proceso, podrá recuperar su libertad.
Ello, si cumple con las medidas cautelares mencionadas.
Arresto
Su arresto se debió a un video grabado y difundido en redes sociales. Ahí se observa al perrito amarrado al vehículo. El canino fue llevado a la Dirección de Salud Animal del Ayuntamiento de Tlaquepaque para recibir atención médica.
Los veterinarios que lo atendieron informaron que el perro, un macho mestizo de aproximadamente dos años, sufrió quemaduras de segundo grado en las cuatro patas. También dolor en los cojinetes debido al arrastre por el pavimento y raspones en otras partes del cuerpo.
Cabe recordar que el Código Penal para el Estado de Jalisco tipifica como delito a quien realice actos de maltrato animal y crueldad hacia cualquier animal, ya sea doméstico o silvestre, ocasionando desde lesiones hasta la muerte.
De acuerdo al Artículo 305, se impondrá una multa por el equivalente de 20 a 50 veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), es decir, dos mil 171 a cinco mil 428.5 pesos a quien cause lesiones a un animal, mientras no se ponga en riesgo sus funciones físicas o su vida.







