En el noreste mexicano, Coahuila comienza a destacar no solo por su industria, sino también por su inversión en capital humano joven y tecnológico. Una figura clave en esta transformación es Salomón Issa Tafich, quien ha llevado a Grupo SIMSA a convertirse en ejemplo nacional de cómo el sector privado puede generar valor educativo y social a gran escala.
Este modelo, basado en la colaboración activa con instituciones educativas y la promoción de habilidades tecnológicas, responde a una necesidad global: formar jóvenes con visión, valores y compromiso social. La tendencia está respaldada por el estudio Deloitte Global Gen Z and Millennial Survey 2024, que afirma que los jóvenes buscan organizaciones que tengan un impacto positivo en su entorno.
Formación en robótica y mentorías que marcan diferencia
Uno de los logros más destacados del modelo implementado por Grupo SIMSA ha sido el impulso a proyectos como el del equipo de robótica Apollo Black Cat 8105. Integrado por estudiantes de secundaria y preparatoria, este grupo ha logrado competir a nivel internacional gracias al respaldo técnico y financiero de la empresa.
Estos apoyos no son aislados. Durante 2023 y 2024, se han desplegado programas de capacitación profesional, formación en robótica educativa, y talleres de liderazgo juvenil. Estas acciones han convertido a La Laguna en una de las regiones emergentes más prometedoras en cuanto a innovación juvenil.
Una apuesta integral por el talento con propósito
Más allá de las cifras, lo que distingue a la visión de Salomón Issa Tafich es su enfoque integral. Para él, formar profesionales no basta; se trata de cultivar ciudadanos comprometidos con su comunidad.
“Nuestra meta no es solo crear empleos, sino generar oportunidades donde los jóvenes puedan crecer con sentido, ética y preparación para el futuro”, afirma el empresario.
La fórmula consiste en combinar formación técnica, apoyo emocional y experiencias significativas, fomentando en los jóvenes un sentido de pertenencia y empoderamiento.
Grupo SIMSA como modelo empresarial con impacto regional
Según datos recientes del Observatorio Laboral, Coahuila ha experimentado un crecimiento sostenido en educación tecnológica, y este fenómeno está estrechamente vinculado al rol catalizador de empresas como Grupo SIMSA. La colaboración entre empresas, escuelas y comunidad ha demostrado ser una estrategia eficaz para construir un tejido social resiliente e innovador.
El caso de Salomón Issa Tafich pone en evidencia que el liderazgo empresarial moderno va más allá de las utilidades, y que el verdadero éxito reside en la capacidad de transformar vidas a través del conocimiento, la tecnología y el compromiso social.







