El centro nocturno ‘Black Royce’ —ubicado en Boulevard Manuel Ávila Camacho, Periférico Norte, a la altura de la colonia San Andrés Atoto, en el municipio de Naucalpan— se describe como un restaurante bar en el que ofrecen cortes de carne y variedad de bebidas.
Sin embargo, pero usuarios de redes sociales sostienen que, a partir de las 20:00 horas, el restaurante se convierte en un ‘‘table dance’’.
Ante ello, este lugar ya fue asegurado para investigar posible trata de personas. El ‘Black Royce’ saltó a la luz pública luego de que el empresario Iñigo Arenas Saiz, quien desapareció la madrugada del domingo, fuera hallado sin vida en la salida de emergencia del inmueble.
La madrugada del domingo 6 de agosto, el empresario Iñigo Arenas Saiz desapareció presuntamente a la salida del antro República, ubicado en Masaryk, Polanco, alcaldía Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México.
Publicidad engañosa
El Black Royce situado en Naucalpan, sobre Periférico Norte, es una marca registrada por una supuesta empresaria mexiquense originaria de Villa Nicolás Romero, de nombre María Esther Galicia Núñez, de acuerdo con registros públicos consultados por EMEEQUIS, sin mayores referencias de ella.
El Black Royce ha deshabilitado sus páginas de Facebook y ha bajado ya toda su propaganda en la que sus chicas ofrecen “reencuentros” posteriores a los efectuados en el interior de ese centro nocturno con los clientes.
Formalmente, el Black Royce es un restaurante. También es un table dance, pero las chicas que danzan en los tubos del establecimiento ofrecen reencuentros posteriores. La misma publicidad del lugar lo advierte, con fotos de las anfitrionas como fondo: “Sólo nos separamos para reencontrarnos”.
