En México, hablar de liderazgo empresarial con responsabilidad social aún representa un reto. Sin embargo, el empresario Gabriel Gadsden ha demostrado que es posible construir un modelo de gestión basado en la coherencia, la vocación humanista y el compromiso con la comunidad. Su trabajo no solo se enfoca en el crecimiento económico, sino también en dejar un impacto positivo en la sociedad.
La empresa con propósito como filosofía de vida
Gadsden asegura que la empresa moderna no puede desligarse de su entorno ni operar sin propósito. Para él, una compañía que busca trascender debe generar valor social además de beneficios económicos. Lo ejemplifica con una metáfora clara: “una empresa con propósito es como un vino bien cuidado: necesita tiempo, atención y vocación social”.
Su pasión por la vitivinicultura es mucho más que un pasatiempo. Representa una filosofía que ha trasladado a su visión empresarial: paciencia, coherencia, sostenibilidad y legado. Tanto en el cuidado de la tierra como en la dirección de un negocio, cada decisión tiene consecuencias que trascienden en el tiempo y en el entorno.
Fundación Ayúdate a Dar: compromiso con la niñez
Una de las iniciativas más representativas de su visión es la fundación Ayúdate a Dar, enfocada en programas de educación, reinserción familiar y acompañamiento emocional para niñas, niños y adolescentes en situación de calle.
Según el Índice de Desarrollo Social de la Secretaría de Bienestar (2023), en México más de 115 mil menores viven en situación de calle, una cifra alarmante que exige acciones contundentes. Para Gadsden, no basta con donar: “Para generar resultados reales hay que involucrarse, diseñar proyectos sostenibles y medir su impacto”.
El impacto social, asegura, solo puede alcanzarse mediante la colaboración entre sociedad civil, gobierno y sector empresarial. En este sentido, Ayúdate a Dar se ha convertido en un puente que impulsa la corresponsabilidad social.
El reto empresarial en responsabilidad social
De acuerdo con el Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI), el 58 % de las empresas medianas y grandes en México cuenta con algún modelo de responsabilidad social, pero solo el 21 % mide el impacto real en comunidades vulnerables. Esta cifra revela que aún falta mucho camino por recorrer.
Para Gadsden, el liderazgo contemporáneo exige coherencia entre discurso, valores y acciones. Un empresario que busca trascender debe comprender que el crecimiento no puede darse a costa de las personas ni del entorno.
Empresas con propósito: el nuevo paradigma
Hoy en día, consumidores, inversionistas y colaboradores buscan empresas que dejen huella positiva en su comunidad. Gadsden está convencido de que una organización que integra el compromiso social en su ADN no solo sobrevive en el mercado, sino que también construye legado.
En un entorno donde la credibilidad en la responsabilidad social aún enfrenta retos, Gabriel Gadsden ha logrado consolidar un liderazgo que inspira. Su modelo empresarial demuestra que el propósito, la sostenibilidad y la vocación social son claves para trascender en el mundo actual.






