El ex presidente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, reclamó públicamente al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) la demora injustificada en resolver su proceso de expulsión, promovido ante la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI el 26 de noviembre de 2024.
Sin embargo, en carta dirigida a la Magistrada Presidenta Mónica Soto, Ochoa Reza interpuso un incidente de excitativa de justicia advirtiendo que han transcurrido casi seis meses desde la interposición de su demanda, sin que el magistrado Felipe Fuentes haya emitido ningún avance procesal.
Ochoa Reza cuestiona la falta de resolución pese a que el caso supone “pruebas supervinientes” —notas de prensa, tuits y entrevistas— que, en su opinión, se leen en cuestión de minutos.
“¿Está bajo presión política? ¿Tiene un compromiso con Alejandro Moreno?”, se pregunta el expresidente priista, al tiempo que denuncia que la conducta del magistrado compromete su derecho a la justicia pronta y a su participación política democrática.
Finalmente, Enrique Ochoa Reza insiste en que la expulsión, dictada por la CNJP del PRI tras señalar que sus manifestaciones afectaron la unidad del partido, se enmarca en una estrategia de retraso y dilación motivada por intereses internos. Además, solicita al Tribunal Electoral que reconozca la improcedencia de las nuevas pruebas y emita de inmediato la sentencia, evitando un fallo contrario a los estatutos del PRI y a la Constitución.
