El niño bailarín mexicano Saúl Alfaro ganó una beca completa para integrarse a la Sesión de Verano de la División Profesional del Royal Winnipeg Ballet.
Desde temprana edad, este pequeño nacido en Guadalajara, en 2012, comenzó a estudiar danza española, flamenco, jazz y danza contemporánea, géneros que le permitieron conocer la libertad a través del movimiento, así como el lenguaje de su propio cuerpo.
La danza se convirtió en una pasión
Contó que fue a través de su profesora Monserrat Martínez, directora de la Academia DanzaAM, que se enteró que el ballet canadiense estaba realizando audiciones para los niños extranjeros de su edad.
“Tres compañeras y yo audicionamos y fuimos seleccionados, pero la prueba era sólo un requisito para poder formar parte de este programa, así que me sorprendió mucho que me otorgara un apoyo completo”, dijo.
Su maestra explicó: “El jurado quedó muy asombrado con la audición de Saúl, vio en él un talento nato y una sensibilidad que pocas veces se ve en un niño de su edad, no porque los demás no lo posean, sino porque es algo que en ocasiones sólo se desarrolla con el tiempo”.
Recaudan fondos
Mientras llega la fecha —del 1 al 20 de julio— la familia recauda fondos y Saúl vende mangonadas y otros dulces en la academia de danza y en su escuela primaria.
“Soy un niño como cualquier otro, me gusta mucho jugar y estar con mi familia, pero también disfruto de cada ensayo y de cada momento que puedo estar en el escenario, acudir a la Royal Winnipeg es un sueño hecho realidad”, añadió Saúl.
Para saber
En la escuela, Saúl es amante de las matemáticas; y, en su día a día, le gusta comer pasta y escuchar música clásica.
El primer rol dentro que interpretó dentro de la danza clásica fue el de Fritz, en El Cascanueces.
Además del ballet, tiene conocimientos en danza española, flamenco, jazz y danza contemporánea.
Cuenta CLABE para recaudar apoyo económico. BBVA 012180015295928816 3 semanas estará en el Royal Winnipeg Ballet de Canadá.







