Una escuela de manejo para perros busca reducir el abandono animal. Aquí estas mascotas aprendieron a conducir un automóvil como parte de un programa de rescate.
La Real Sociedad de Nueva Zelanda, a través de su programa de Prevención de la Crueldad contra los Animales, lanzó esta iniciativa con el objetivo de sensibilizar al público sobre el abandono de perros.
Especialmente aquellos que son mestizos y que frecuentemente son discriminados y dejados en las calles.
Buena iniciativa
La iniciativa no solo buscaba sorprender, sino también cambiar la percepción sobre estos animales y promover su adopción.
Los perros seleccionados para el programa recibieron un entrenamiento intensivo de siete semanas. Durante este tiempo, aprendieron a interactuar con botones, manejar la palanca de velocidades. Y, finalmente, a tomar el control del volante desde una silla adaptada dentro del vehículo.
Este meticuloso proceso de entrenamiento no solo mostró la capacidad de aprendizaje de los caninos, sino también su capacidad para superar desafíos complejos.
Porter fue el primer perro en graduarse de la escuela de manejo, seguido por Ginny y Monty.
Estos tres caninos no solo aprendieron a conducir, sino que también se convirtieron en símbolos de lo que los canes mestizos pueden lograr con el entrenamiento adecuado y el amor necesario.







