
Alemania, 7 Julio.- El día de ayer la policía de Hamburgo tuvo que recurrir a cañones de agua para dispersar a manifestantes que querían bloquear los accesos a la cumbre G20, dejando un saldo de 11 agentes heridos y 44 personas detenidas.
Los 12 mil activistas que participaron en la manifestación intentaron bloquear los accesos al recinto donde se llevaría a cabo la cumbre de las principales economías del mundo y las potencias emergentes.
Cerca de dos mil activistas encapuchados como miembros violentos, lanzaron objetos a la Policía, dando como resultado coches quemados, destrozos por las calles y agentes heridos.







