Nicolas Puech, descendiente de la quinta generación de la familia Hermès y uno de los principales inversionistas de la icónica marca de lujo, anunció su intención de adoptar formalmente a su jardinero. Lo designaría como heredero de su vasta fortuna.
Nicolas Puech, de 80 años, quiere adoptar a su exjardinero de 51 años para legarle su fortuna de 11 mil millones de dólares. Puech es nieto del fundador del gigante de la moda y posee el 5.7% de la empresa.
Según reporta Le Parisien, Puech ha expresado su deseo de adoptar a su jardinero como su hijo legal. Esta decisión, que ha sorprendido a la comunidad internacional, podría tener implicaciones significativas para el futuro de la marca Hermès.
La historia de Hermès, una marca sinónimo de lujo, artesanía y exclusividad, se ha entrelazado siempre con la familia Puech. Durante generaciones, la dirección y la visión de la empresa han estado firmemente en manos de sus descendientes. La decisión de Nicolas Puech rompe con esta tradición, introduciendo un elemento externo a la línea de sangre en la jerarquía de la compañía.
De acuerdo con El País, el jardinero, cuyo nombre no ha sido revelado por razones de privacidad, ha estado al servicio de la familia Puech durante más de dos décadas. Según fuentes cercanas a la familia, su dedicación y lealtad han sido factores clave en la decisión de Nicolas Puech.
Esta acción no solo reafirma la confianza de Puech en su empleado, sino que también subraya un cambio en la percepción de la herencia y la sucesión en un mundo dominado por linajes y conexiones de sangre.







