Cuidad de México, 30 May.- Nacida el 29 de noviembre de 1899 en un pueblo de Civiasco, en la región de Piamonte en el norte de Italia, Emma Morano de 116 años es considerada como la persona más longeva del mundo, de acuerdo con el registro del libro de Récord Guinness.
Carlo Brava es el médico que visita a Emma Morano una vez por semana y quien le dicta su receta alimenticia. Y aunque dos de las sobrinas de Emma y un auxiliar de enfermería son las encargadas de cuidarla, ya que ella no puede caminar y tiene problemas de visión, ha llevado una vida digna de cualquier récord y reconocimiento.
Fue en un reportaje hecho por el New York Times en 2015, donde Emma ella detalló que a pesar de su vida independiente, ha sido gracias a sus peculiares hábitos alimenticios que ha logrado llegar a 116 años.
Confirmó que come tres huevos al día, dos crudos y uno cocido. Lo lleva haciendo más de 90 años, desde que un médico se lo recomendó para tratar la anemia.
Desayuna, un vaso de leche con galletas
Disfruta de platos de pasta
Su consumo de proteína pura con porciones de carne molida cruda.
Le gustan los chocolates, el pure de manzana y las galletas de sobremesa.
Una bebida que difruta de ves en cuando, es el brandy, lo prefiere al vino.
Come pocas verduras lo contrario a lo que recomiendan los expertos en salud.
Duerme, dos siestas al día y, antes de irse a la cama (siempre lo hace a las 23 horas), también come algo.
Emma señaló también que sus largos años tienen que ver con mantenerse en la soltería y ser independiente durante mucho tiempo.
Luego de que su gran amor no regresara de la Primera Guerra Mundial y a pesar de que en 1926 se casó con otro hombre con quien tuvo un hijo, fue en 1938 cuando decidió abandonarlo y vivir una vida plena y en solitario, acción poco común en una Italia influida por la iglesia católica.
Posteriormente trabajó en una fábrica donde hacía sacos de yute para después incursionar en el mundo de los alimentos como cocinera. Emma asegura que aunque tuvo muchos pretendientes, siempre supo que no quería estar dominada por nadie.
Cuando le informaron que tenía el récord de la persona más longeva del mundo, declaró:
“¡Caramba! Soy tan vieja como las montañas”.
No obstante, “está muy contenta” con el título, dijo Rosi Santoni, una familiar que cuida de la anciana.
Tiene una vida social limitada, no sólo porque no oye ni ve muy bien, sino porque sus amigos han fallecido. Hace mucho no sale de su casa pues se cansa rápidamente. Sin embargo, es la prueba más contundente de que llevar buenos hábitos alimenticios y seguir los ideales, son benéficos para la salud.
Imágenes: BBC.com/ adnradio.cl
