Ciudad de México, 12 Ene.- Como una medida de austeridad, el Instituto Nacional Electoral (INE) reintegrará mil 70 millones de pesos a la federación para que sean reasignados a programas socialmente prioritarios. Dichos recursos serían destinados a la construcción de las nuevas oficinas, previstas para este año.
El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, anunció medidas de austeridad adicionales, entre ellas la reducción de 10% de las remuneraciones que perciben los consejeros y la renuncia a la prestación de los servicios de telefonía celular, por la que este año recibirían un teléfono iPhone 7 plus.
Así, cada uno de los consejeros asumirá el gasto en telefonía de manera personal, informó en conferencia de prensa.
El organismo hará una revisión en la política de uso de los vehículos oficiales y no incrementará los montos asignados para gastos de gasolina.
Lorenzo Córdova aseguró que el INE hará público el ejercicio del presupuesto cada trimestre y que la junta General Ejecutiva aprobará en febrero un conjunto adicional de medidas de austeridad.
“México vive una coyuntura histórica difícil y compleja que afecta al desempeño de la economía, al bienestar de la sociedad, a la credibilidad de sus instituciones públicas y que alimenta un extendido malestar social”, dijo.
El consejero presidente dijo que concluirán la etapa de planeación inmobiliaria, consistente en la elaboración del Proyecto Ejecutivo de las nuevas instalaciones, a efecto de que junto con el plan maestro sea un insumo disponible para que más adelante se realice la construcción, “si un contexto económico favorable lo permite».
“La racionalidad de sustituir gasto corriente en rentas por inversión en patrimonio público sigue vigente y reiteramos la pertinencia de la propuesta de construcción y concentración de las oficinas centrales en Tlalpan, pero los consejeros entendemos que por ahora se reconsidere el destino de esos recursos”, destacó.
Córdova Vianello aseguró que con dichas medidas, el INE ratifica su compromiso como institución del estado al servicio de la democracia, porque la confianza en torno a su actuación es el primer insumo para cumplir con la función constitucional de garantizar los derechos políticos de los mexicanos y de organizar los procesos electorales en el país.
Con información de Milenio
