Estados Unidos, 24 Mayo.- El día de hoy se presentó en el Congreso de Estados Unidos un presupuesto para el año fiscal 2018 de Estados Unidos, que cuenta con recortes en la ayuda a los pobres y a la diplomacia, pero con un mayor gasto militar.
El plan busca generar un equilibrio presupuestal en 10 años, achicando los beneficios que reciben miles de estadounidenses de bajos ingresos.
En total se trata de la cantidad de 4.1 billones de dólares la que se recortara, sin embargo cabe destacar que esta no será aprobada en el Congreso tal cual lo envió la Casa Blanca, ya que por lo general es modificado en largas negociaciones.
El texto menciona que el presupuesto será rebajado a 3.6 billones de dólares en 10 años, mismo que incluirá los gastos de asistencia médica y los cupones de alimentación que reciben las personas de bajos recursos.
Hay que tener compasión por la gente que recibe fondos federales pero también hay que tener compasión por quienes los pagan. Director de Presupuesto de la Casa Blanca
Esto equivale a que el Departamento de Estado y la Agencia de Protección Ambiental, tendrá un recorte de por lo menos un tercio de lo que solía recibir por parte del país, en cambio, el gasto en Defensa aumentará más de 50 millones de dólares, lo que supone 10 mil millones por encima de los niveles de 2017.
También incluye 2 mil 600 millones de dólares para seguridad fronteriza y contra la inmigración, así como mil 600 millones de dólares para construir un muro en la frontera con México.
Sin embargo hay muchas personas morales que se encuentran en contra de dicho recorte y protestan porque los fondos fueron drásticamente cambiados y muchos de los que sufrirán un mayor recorte, sirven de contención social para los más pobres.
La Oficina de Presupuesto del Congreso calcula que reducir el Medicaid afectará la atención de más de 10 millones de personas.
Todo el presupuesto de Trump se basa en la estimación irreal de crecimiento y que ha ya sido rechazada por economistas influyentes. Advirtió el senador demócrata Mark Warner.
Por otro lado, Larry Summers, ex secretario del Tesoro y asesor de Barack Obama, calificó de «simplemente ridículo» el modelo presupuestal de la Casa Blanca.
La administración Trump no ha hecho un solo pronunciamiento económico que se ajuste a estándares mínimos de competencia y honestidad.
Información Universal / imagen vía web
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