La aparición de un disco duro podría esclarecer el caso de la desaparición de Madeleine McCann hace 18 años.
Nuevas revelaciones apuntan directamente al principal sospechoso, Christian Brueckner.
El dispositivo fue encontrado en 2016 por la policía alemana en una antigua fábrica propiedad de Brueckner.
Según el diario The Sun, el disco contendría descripciones explícitas de secuestros y conversaciones entre pedófilos.
Además de perturbadoras imágenes del sospechoso en lugares vinculados directamente con la desaparición de Madeleine.
Ron Pattinson, periodista británico que ha seguido de cerca el caso, dijo que el contenido de este disco «hará que el mundo se detenga».
En sus palabras, «desafiará todas las leyes de la lógica y de la ciencia». Demostraría por qué las autoridades alemanas están convencidas de que la niña está muerta.
Pattinson afirma, además, que el material podría mostrar que Brueckner asesinó a Madeleine poco después de secuestrarla. Según él, hay fotografías en poder de los investigadores que aún no han sido reveladas públicamente.
Los registros telefónicos sitúan a Brueckner en la zona del Algarve, Portugal, el mismo día de la desaparición de Madeleine. Eso refuerza aún más las sospechas. Para Pattinson, el caso ya no deja lugar a dudas.
«Mientras ves las pruebas, mientras escuchas sus enfermizas fantasías y observas las imágenes espeluznantes, debes preguntarte: ¿de qué es realmente capaz este hombre?», dijo el periodista.
La gravedad de las pruebas no termina en el disco duro pues en la fábrica donde se encontró. También fueron hallados objetos como ropa y juguetes infantiles, máscaras, armas y productos químicos.
Además de que una caravana en la que residía el sospechoso, se descubrieron además 8.000 imágenes de pornografía infantil y varios bañadores de niña, lo que subraya un patrón inquietante de comportamiento.
En 2020, las autoridades alemanas excavaron una parcela en Braunschweig, donde Brueckner vivió tras la desaparición de Madeleine, en busca de restos y aunque no se encontraron indicios directos de la niña, sí se hallaron objetos infantiles en un zulo oculto.
Esta búsqueda surgió en el marco de otra investigación, la de Inga Gehricke, conocida como «la Maddie alemana», desaparecida en 2015 a escasos 80 kilómetros de ese lugar. Y como si no fuera suficiente, documentos recientemente revelados muestran la metodología de Brueckner para perpetrar sus crímenes.
La urgencia del caso se intensifica ante un inminente riesgo pues Christian Brueckner, principal sospechoso podría quedar en libertad el próximo 17 de septiembre si no se logra avanzar judicialmente.
El hombre actualmente cumple condena por delitos de violación y agresión sexual contra mujeres adultas y ancianas, pero no ha sido aún sentenciado por el caso de Madeleine McCann por lo que las autoridades alemanas han solicitado colaboración urgente al Reino Unido, advirtiendo que dejarlo libre representaría «una injusticia irreversible».
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