Se ha estado mencionando últimamente que la pandemia de covid-19 no solo impactará de manera económica en algunas empresas sino que también impedirá el acceso de las mujeres a métodos de planificación familiar, lo que significa que podría haber un aumento de embarazos no planeados.
Gabriela Rivera, Oficial Nacional de Salud Sexual y Reproductiva del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en México, mencionó a través del medio Excélsior que se estima que los nacimientos sean de 869 mil 880 mexicanas.
Debido a que hay reducción del uso de anticonceptivos va a traer consecuencias para las mujeres, y cerca de 325 mil embarazos no planeados.
Una de las causas del porque se está interrumpiendo las cadenas de suministro, es debido a la reducción de los servicios de consejería y el propio miedo de las mujeres a acudir y pedir ayuda en cuanto los métodos de planificación familiar.
“Esto da por consecuencia el riesgo de muchos embarazos no planificados, no deseados, a veces en condiciones de riesgo, con personas que tienen algunos factores como presión alta, diabetes, obesidad, en fin, que dejan de utilizar el método anticonceptivo y que quedan embarazadas con la dificultad o la limitación de acudir a sus consultas prenatales, lo que va aumentar todavía más los riesgos a la salud”, explicó Rivera
Asimismo se dijo que: “Un nacimiento de un niño no deseado impacta en muchos sentidos, no sólo en la vida de ese niño o en la vida de esa familia, sino dependiendo del número, tiene impacto en lo económico, en la salud general, en el maltrato hacia las mujeres, la violencia y al final de cuentas un impacto en el empobrecimiento de la sociedad.
Así que se estima que la interrupción de los métodos anticonceptivos en el mundo podría ir ser desde 5% a 40% en el sector público.