Ciudadanos norteamericanos tomaron calles de Veracruz desde donde rechazaron, con pancartas, las políticas del presidente estadounidense Donald Trump en contra de mexicanos en ese país.
En el centro de esta capital se instalaron con pancartas para expresar su inconformidad por el trato y las disposiciones de deportación. Y es que provocarán la separación de familias y la vida de los mexicanos productivos en aquel país.
Roy Dudley, uno de los manifestantes, expresó que la política de Trump en contra de los mexicanos en Estados Unidos no ayuda en nada a pacificar el mundo. Sobre todo en este momento en el que hay revueltas en diferentes partes del mundo.
“Queremos que los mexicanos que trabajan en Norteamérica y que ayudan a su economía permanezcan, porque ayudan y se ayudan. Es una política nefasta”, dijo.
El grupo de estadounidenses que radican en la región acusan que Trump ha sido lo peor que le ha pasado a la Unión Americana.
Su postura racista podría traer más consecuencias negativas a la relación con México. Un país que, por el contrario, ha sido hospitalario con los ciudadanos de otros países que aquí residen, dijeron.
“Desde aquí pedimos inclusión en las escuelas en los Estados Unidos, respeto a los derechos de los migrantes y compasión. Rechazamos las deportaciones y la separación de familias por falta de ciudadanía”, expresaron.
Trump y la «invasión»
El presidente de Estados Unidos describió este domingo a Los Ángeles como una ciudad «invadida y ocupada por inmigrantes ilegales y criminales».
Aseguró que las protestas desatadas en respuesta a las redadas masivas de migrantes «fortalecen» su determinación de deportar.
«Estos disturbios sin ley sólo fortalecen nuestra determinación. Estoy ordenando a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem; al secretario de Defensa, Pete Hegseth; y a la fiscal general, Pam Bondi (…) que tomen todas las medidas necesarias para liberar a Los Ángeles de la invasión de inmigrantes y poner fin a estos disturbios de inmigrantes», escribió el mandatario en Truth Social.
